El agua es el componentes más abundante de nuestro cuerpo y cumple con diversas funciones vitales, las principales funciones del agua en nuestro cuerpo consiste en ser el medio donde se disuelven todos los líquidos corporales, como la sangre, linfa, secreciones digestivas, heces y orina. El agua facilita el transporte de nutrientes al interior de las células, de las sustancias de desecho, además interviene en los procesos digestivos, disolución de los nutrientes que contienen los alimentos y en la digestión de los mismos.
El agua en nuestro cuerpo también interviene en la regulación térmica del organismo a través de la evaporación por la piel, participa en todas las reacciones que se llevan a cabo para producir energía. Como podemos darnos cuenta el agua es esencial para los procesos más vitales, sin ella prácticamente no hay vida. Por ello el organismo cuenta con una señal de alarmas para indicarnos que necesita de agua: la sed.