Existe la idea de que la mejor leche materna es aquella que se produce en los primeros meses de lactancia y que, con el tiempo, su calidad nutricia va disminuyendo. Recientes investigaciones demuestran lo contrario. Ahora se sabe que mientras más prolongado sea el periodo de lactancia, mayor será el contenido calórico y de grasa de la leche materna. Hasta el momento no existe un acuerdo científico sobre el tiempo recomendable para que una madre amamante a su hijo. Algunas asociaciones recomiendan que la lactancia materna debe tener una duración de 12 meses y a partir de entonces, todo el tiempo que se desee mutuamente.
Aunque existan teorías a favor y en contra de los tiempo prolongados de lactancia materna, en general, prevalecia la idea de que la calidad disminuye con el tiempo; para comprobarlo, los investigadores trabajaron con dos grupos de mujeres y encontraron que la leche de las que habían amamantado a sus hijos más allá de los 12 meses contenía 17.5% de grasa, mientras que los que lo hicieron tan solo entre dos y seis meses contenían solamente un 5% de grasa. Ahora que se conoce esta diferencia, será necesario seguir estudiando los efectos de este alto contenido calórico y graso.