Es un valor que nos permite aceptar y comprender a las personas que son diferentes a nosotros, ya sea en apariencia física , cultura, tradiciones o formas de pensar. En la constante búsqueda de la paz mundial, los Estados miembros de la UNESCO, firmaron en 1995 la declaración de principios sobre la tolerancia, con el objetivo de fomentar este valor para que las naciones progresen económica y socialmente. En dicha declaración se recogen palabras sobre como tolerancia, donde nos haba del respeto, la aceptación y el aprecio de la rica diversidad de las culturas de nuestro mundo.
Como todos los buenos valores en la vida, la familia representa la mejor escuela para aprender sobre la tolerancia, pero recordemos que sin el ejemplo de los padres de poco sirven las palabras. La injusticia, la violencia, la discriminación y la marginalización son con frecuencia efectos comunes de la intolerancia. Sin embargo, la diversidad no debería ser motivo de conflictos, sino de un riqueza valorada por todos.