Debes ser en todo momento consciente de tu postura, cuando camines o cuando estés sentado corrige cualquier curvatura de la espalda, adquiere de forma consciente la costumbre de tensar el abdomen y descansa el peso sobre ambos pies. Cuando estés sentado acuérdate de alinear la espalda y de colocar las rodillas más altas que las caderas. Si tienes que levantar cualquier peso hazlo con las piernas y no con la espalda, ponte en cuclillas y flexiona las rodillas, cuando los despegues del suelo mantenlo cerca del cuerpo.
Es importante que a la hora de dormir lo hagas sobre un colchón más bien duro, la mejor forma de hacerlo es de costado con las rodillas dobladas. En la oficina utiliza sillones que se puedan regular en la altura y cuando trabajes en la computadora intenta que esté justo delante, apoya la espalda a la silla y mantén los brazos en los costados con los codos ligeramente doblados, las muñecas y las manos arriba
